SEGURIDAD SÍ
La Militarización, no es la solución.
#SeguridadSí
Durante los últimos 20 años, México ha adoptado una estrategia de militarización de la seguridad pública como respuesta a la grave crisis de violencia que vive el país.
Esta política ha resultado en constantes violaciones de derechos humanos y crímenes de derecho internacional por parte de las instituciones de seguridad y defensa, incluyendo ejecuciones extrajudiciales, tortura, detenciones arbitrarias, y tratos crueles e inhumanos.
Fecha arranque:
20.11.2024
Lugar:
México
Temas que abordamos:
Militarización Seguridad Civil Derechos Humanos Fuerzas Armadas
Impacto
Que las autoridades diseñen estrategias de seguridad enfocadas en la protección y respeto a los derechos humanos.
Es urgente que México adopte un enfoque de seguridad ciudadana que respete y garantice los derechos humanos. A medida que las Fuerzas Armadas asumen tareas de seguridad, se ha creado una lógica de “enemigo interno” que prioriza el uso de la fuerza letal sobre medios pacíficos y sostenibles.
Este enfoque contradice los compromisos internacionales de México en derechos humanos y las recomendaciones de organismos como la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que recalcan que las Fuerzas Armadas deben intervenir sólo de manera extraordinaria, regulada y subordinada a la autoridad civil.
México ha transferido las funciones policiales esenciales a sus fuerzas armadas, lo que ha ocasionado violaciones graves a los derechos humanos.
Con base en los estándares de derechos humanos, proponemos cuatro principios para la desmilitarización de la seguridad pública en México
1.Diseñar estrategias de seguridad enfocadas en la protección y respeto de los derechos humanos.
2.Encaminar una reforma policial comprometida a que las funciones de cumplimiento de la ley y labores de seguridad, sean llevado a cabo por un organismo federal con mando, estructura, disciplina y adscripción de carácter civil con un enfoque de respeto y protección de la vida, la integridad personal, la libertad y la seguridad personales.
3.Modificar de forma inmediata el funcionamiento de la Guardia Nacional para asegurar el pleno respeto de los derechos humanos en todas sus operaciones.
4. Encaminar una reforma militar para delimitar las funciones de las Fuerzas Armadas bajo un marco normativo que respete y garantice los derechos humanos.