Paul Rusesabagina. (Foto: Marvin Joseph/The Washington Post vía Getty Images)
Mientras la Fiscalía Nacional de Ruanda examina el expediente de Paul Rusesabagina, Amnistía Internacional pide a las autoridades ruandesas que garanticen su derecho a un juicio justo. Paul Rusesabagina es un líder opositor político, conocido internacionalmente como el director de un hotel de Kigali que salvó a más de 1,200 personas que buscaron refugio huyendo de una matanza étnica.
La Oficina de Investigación de Ruanda llevó a cabo investigaciones sobre Rusesabagina por denuncias que incluían terrorismo, incendio provocado y asesinato, presuntamente cometidos en el distrito de Nyaruguru, en junio de 2018 y en el distrito de Nyamagabe, en diciembre de 2018. La Oficina entregó el expediente del caso a la Fiscalía el 9 de septiembre de 2020.
“La falta de transparencia en torno a la detención de Paul Rusesabagina, y los informes de que se le ha negado el acceso al abogado contratado por su familia, son señales de alarma que no se pueden ignorar mientras las autoridades se preparan para su juicio”, declaró Deprose Muchena, director de Amnistía Internacional para África Oriental y Austral.
“Las autoridades deben decir la verdad sobre las circunstancias de su detención, y qué sucedió exactamente entre el jueves 27 de agosto (cuando habló con su familia después de llegar a Dubai) y el lunes 31 de agosto (cuando se le exhibió ante los medios de comunicación en Kigali). Suponiendo que durante ese tiempo estuvo detenido y que las autoridades ruandesas ocultaron información sobre su paradero. El suyo es un caso de desaparición forzada.”
“Paul Rusesabagina debe comparecer sin demora ante un juez para que se supervise la legalidad de su detención y se impidan nuevas violaciones de sus derechos.”
Hasta el momento, las autoridades ruandesas se han negado a explicar las circunstancias del traslado de Rusesabagina a Ruanda. Los medios de comunicación citaron a una autoridad de Emiratos Árabes Unidos quien declaró que Rusesabagina salió de Dubai legalmente en un avión privado, y negó que su gobierno estuviera implicado de modo alguno en su detención.
El presidente Paul Kagame, al negar que Paul Rusesabagina hubiera sido secuestrado, sugirió en la televisión nacional, el domingo 6 de septiembre, que Rusesabagina, ciudadano belga y residente en Estados Unidos, había sido engañado de alguna manera para que regresara al país, y dijo: “Llegó aquí basándose en lo que creía y en lo que quería hacer. Es como cuando haces una llamada telefónica para ponerte en contacto con alguien y te encuentras con que has marcado un número equivocado. Eso es lo que sucedió. No hubo secuestro. Fue una operación impecable”.
Abogado defensor
Según los informes, Paul Rusesabagina ha elegido un abogado defensor de una lista proporcionada por el Colegio de Abogados de Ruanda. Su familia también ha designado a un equipo legal que incluye a otro abogado ruandés —a quien se le ha negado el acceso a Rusesabagina— y cinco abogados más en otros países.
“Rusesabagina tiene derecho a contar con asistencia jurídica de su elección. Debe permitírsele que se reúna en privado con el abogado designado por su familia para que pueda tomar una decisión informada sobre el equipo que le defiende”, manifestó Deprose Muchena.
Aunque Rusesabagina declaró a una persona periodista —que ha tenido acceso a él en una decisión poco habitual de la Oficina de Investigación de Ruanda, y antes de que Rusesabagina tuviera contacto con asistencia jurídica, autoridades consulares o su familia— que lo han tratado bien y que le han permitido acceder a médicos y a su medicación, advirtió que mientras esté bajo custodia no está en situación de hablar con libertad.
En 2017, el Subcomité de las Naciones Unidas para la Prevención de la Tortura suspendió una visita a Ruanda porque le impedían mantener entrevistas privadas y confidenciales con algunas personas detenidas, y por el riesgo de represalias que corrían las personas con las que se reunía.
A Paul Rusesabagina le permitieron telefonear a su familia el 8 de septiembre, pero sus familiares dijeron a Amnistía Internacional que no pudo hablar libremente.
Amnistía Internacional ha documentado numerosas violaciones del derecho a un juicio justo en otros casos que implicaban a opositores políticos y personas que criticaban al gobierno.
Información complementaria
Paul Rusesabagina, se ganó el reconocimiento internacional tras el estreno de la película “Hotel Ruanda” en 2004 −que describe la forma en que salvó a 1,200 personas de una matanza étnica−, lleva muchos años participando en la oposición política desde la diáspora y se ha mostrado muy crítico con el historial del gobierno del Frente Patriótico Ruandés.
En 2006 fundó el partido político PDR-Ihumure. En la actualidad es presidente del Movimiento Ruandés por el Cambio Democrático (MRCD), una coalición de grupos de oposición entre los que se encuentra PDR-Ihumure, y cuyo brazo armado, las Fuerzas de Liberación Nacional (FLN), se atribuyeron la responsabilidad de una serie de ataques armados en Ruanda en 2018. Rusesabagina ha manifestado públicamente su apoyo sin reservas al FLN.
Callixte Nsabimana, ex portavoz del FLN, fue detenido en 2019 y actualmente está siendo juzgado por cargos entre los que se encontraba la formación de un grupo ilegal de milicia, participación en actividades terroristas, homicidio, secuestro, y negación y cuestionamiento del genocidio.