A nivel global 2019 ha sido el año de las movilizaciones populares masivas, especialmente en la región de las Américas, con Chile, Ecuador y Bolivia como referentes de la lucha contra las políticas y narrativas anti derechos humanos y de odio que permean la política internacional actual. En México, a pesar de los avances simbólicos
del Estado reconociendo la grave crisis de derechos humanos que enfrenta el país, y las disculpas públicas por atrocidades del pasado; vemos con preocupación la falta de perspectiva de derechos humanos a la hora de hacer política pública, especialmente en materia de seguridad pública, migración, violencia contra las mujeres y personas defensoras de derechos humanos.